La característica principal de este tipo de techo es su estética atractiva, minimalista y vanguardista ya que el acabado es totalmente liso a las dos caras, sin tener que ver molestos travesaños de apoyo.
A comparación de otros materiales como el policarbonato o el cristal, el panel sándwich de aluminio posee muy buen coeficiente térmico, es decir nos aislará mejor de la temperatura exterior y de molestos ruidos.
Se fabrica en dos espesores, 52 milímetros y 82 milímetros.
Los techos móviles deslizantes están especialmente ideados para disfrutar de la terraza tanto en invierno como en verano dada su versatilidad y fácil manejo.
Este techo consta de tantas calles como necesitemos de ancho y en la salida tendremos tres placas, con lo que la apertura máxima será del 66%.
La cubierta puede ser de policarbonato o panel sándwich de aluminio y dada la ligereza de ambos materiales no necesita motorización.
Siendo el mismo tipo de techo que el deslizante, la diferencia reside en el tamaño que podemos alcanzar con este techo.
A diferencia del deslizante con el corredizo alcanzaremos hasta cinco placas de salida, lo que nos da mayor espacio y a la vez mayor porcentaje de apertura.
La cubierta puede ser de policarbonato, panel sándwich o bien cristal.
La mayor envergadura y peso del techo corredizo nos obliga a la utilización de motores eléctricos.
Las claraboyas son también un tipo de techo mucho mas pequeño y normalmente prefabricado de fibra transparente o traslúcida.
Existen de diferentes tamaños, fijas o con apertura manual o eléctrica.